El dentista Ignacio Diego Fisfakin ha sido el encargado de escribir el articulo y de realizar los diferentes estudios correspondientes junto a su equipo de trabajo. A sus 62 años, lleva toda una vida dedicada a la odontología, y en especial al blanqueamiento de los dientes. Ignacio advierte que el semen tiene que ser de humano, preferiblemente el de uno mismo, “No vayan a probar con semen de mapache o rinoceronte, no es igual de eficaz y puede dañar la dentina. Yo uso es el de mi suegra, es una maravilla”
Cansado de la dentadura amarillenta de su mujer y de haber probado todo tipo de remedios, un día tuvo la brillante idea de eyacular en el vaso que usaba su esposa para la dentadura postiza, “Al día siguiente estaban mas blancos que la teta de una monja, mi mujer no se lo podía creer, lo peor de todo es que aun no sabe a que se debe”. El doctor afirma que con untar los dientes de semen 2 veces por semana, en tan solo 4 meses se puede recuperar el blanco natural que perdimos a costa de fumar pitillos en el recreo.
