Florentino Pérez ha decidido aceptar de manera oficial esta misma mañana la propuesta realizada por los presidentes del F.C.Barcelona y Deportivo Alavés para que la final pueda ser disputada en el histórico Santiago Bernabéu el próximo 27 de mayo. “Este año no habrá un concierto el día anterior” Declara Florentino para Real Madrid TV. El presidente del club blanco ha puesto unas condiciones para que la final se juegue en Madrid. La primera es que los abonados del Real Madrid tengan un 50% de descuento para acceder a la final pero a cambio tendrán que animar al Deportivo Alavés, para ello se les entregará una bubucela y banderas blanquiazules.
La segunda condición del tito Floren es que las entradas para aficionados culés tengan un coste superior a los 130 euros mientras que los aficionados blanquiazules puedan conseguir su entrada dese 24 euros, toda una ganga. A pesar de estas normas Josep María Bartomeu sigue de acuerdo en jugar en Madrid. Los guardias de seguridad solo cachearan a los aficionados culés y harán la vista gorda a los vitorianos que intenten introducir bengalas al recinto, momento que aprovechará el grupo radical Iraultza para hacer un bengaleo histórico en el fondo sur, y sobra decir que si el Deportivo Alavés sale campeón, habrá barra libre de cerveza y calimotxo hasta altas horas de la madrugada.
La Cibeles será preparada para los aficionados del Alavés que quieran celebrar la copa en la capital de España. El monumento por excelencia para las celebraciones de los títulos blancos estará plagado de Ikurriñas y de pancartas con mensajes como “Ongi etorri”, “Zorionak” o “Caguen sos Patxi” Entre otras. Florentino ya se ha puesto en contacto con Antiviolencia para que en caso de que haya una pelea en los aledaños del estadio, el único sancionado sea el que vaya vestido con prendas del F.C.Barcelona.
