Los médicos están convencidos de que esta descomposición será crónica, o lo que es lo mismo, de por vida, pero no pueden asegurar que el kebab sea directamente el culpable de la diarrea. El pobre Germán está seguro que si, “Si doy dos pasos me cago encima, desde que comí aquel Dürüm no he vuelto a cagar duro, tengo que decir que estaba cojonudo pero algo me sentó fatal, la salsa blanca no estaba como de costumbre,” dice Germán desde el hospital.
Germán Ibáñez ya ha contratado un abogado experto en estos casos, y se plantean pedir una indemnización de hasta 9.500 euros por causante de la enfermedad y una sanción por atentar contra la salud publica. El establecimiento ya ha sido cerrado después de haber recibido una inspección de sanidad en la que encontraron varias ratas, piernas humanas y muchas bufandas del Getafe F.C.
“Esto es muy sospechoso, no hay turcos del Getafe, algo nos ocultan” Declara uno de los inspectores.